Transformación tecnológica de la criminalidad por el COVID-19
La emergencia del COVID-19, afectó muchas de las actividades humanas alrededor del mundo, principalmente en países donde el contagio de la enfermedad fue severo y se tuvieron que aplicar medidas restrictivas de movilidad e interacción social, para frenar el avance de esta pandemia en todo su territorio.
Los efectos de estas medidas aplicadas, también alcanzaron a los distintos actores de la delincuencia común y organizada, quienes se vieron fuertemente afectados por la dificultad de continuar con sus negociaciones, la imposibilidad de mover sus productos de un punto a otro, y el entorpecimiento de sus operaciones financieras.
Al ver el éxito de las empresas que utilizaron la tecnología a su favor, para continuar con algunas actividades económicas fundamentales de sobrevivencia a esta crisis de salud, decidieron emprender sus actividades ilícitas en este mundo virtual y desconocido para ellos, con nuevos retos digitales a superar.
Tecnologización criminal
Esta decisión representó una fuerte transformación de sus operaciones; adaptación de sus procesos operacionales; adquisición de infraestructura tecnológica; y la contratación de personal altamente capacitado, para la gestión efectiva de los recursos necesarios, que facilitan su incursión al ciberespacio.
De estos recursos necesarios, los humanos tienden a complicar la incursión de la criminalidad común y organizada al mundo virtual, ya que se necesita de un alto grado de especialización, para operar ilícitamente sin ser descubiertos por equipos, programas, o las propias víctimas a quienes se están intentando afectar.
Alianzas y reclutamientos
Para no padecer estas complicaciones, la delincuencia común se asoció con personas capacitadas en tecnologías digitales, mientras que, el crimen organizado, buscó el reclutamiento de expertos informáticos, para emprender con éxito estas nuevas actividades ilícitas en un espacio digital de nuevas oportunidades.
Por lo tanto, veremos a muchos jóvenes tecnólogos incursionar al mundo criminal, en donde provocarán mucho daño por las sorprendentes habilidades técnicas que poseen. Esto generará nuevas amenazas que debemos tomar en cuenta, para integrar soluciones de prevención a nuestros planes de seguridad.
Recomendaciones
- Primeramente, debemos realizar una evaluación de riesgos, para determinar el tratamiento más efectivo de prevención, que se debe implementar en nuestros hogares, empresas e instituciones.
- Instalar sistemas tecnológicos de software y hardware, que ayuden a detectar y prevenir intrusiones en la infraestructura informática. Esto es un aspecto técnico que debe ser orientado por expertos.
- Monitorear los cambios de comportamiento de las personas que integran nuestra familia u organizaciones, ya que los humanos son el principal objeto de un ciberataque hoy en día.
- Implementar un programa de sensibilización y capacitación, para desarrollar una cultura efectiva de seguridad, que incluya los aspectos cibernéticos más importantes conforme a los riesgos.
- Mantenerse actualizado de los últimos acontecimientos en este nuevo ámbito de acción, con reportes, noticias y contenidos, que ampliarán su conocimiento sobre esta importante temática.
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